¿Te has topado en tu vida con personas felices? Que las ves o estás con ellas y puedes sentir su linda energía y su alegría por vivir, gente única que va contagiando alegría siendo ella misma sin importar lo que digan los demás y sin permitir que nadie ni nada les quite su paz, su momento, que como esa persona está en un nivel de conciencia alto… disfruta y valora cada momento como si fuera el último.
Por el contrario, también seguro se han topado con personas amargadas y les voy a contar mi opinión sobre cómo es que pudieron hacerse amargadas…. Dios, la vida, nos va poniendo diferentes obstáculos, unos más fuertes que otros… Hay personas que los aprenden a surfear y salen de ellos… otras que en lugar de hacer eso se victimizan y hacen que el momento los carcoma hundiéndose en sus lamentos, pensando ¿Porque a mí? ¿Por qué? La respuesta es por qué lo necesitas para crecer y para hacerte más fuerte y valiente, porque son pruebas para que el día de mañana si algo más fuerte se nos presenta podamos salir adelante y tengamos la frente en alto. No nos preguntemos el ¿Por qué? cuando nos llega alguna situación difícil, si no el ¿Para qué? y con el tiempo les aseguro que lo van descubriendo y el tiempo cura y acomoda todo de mejor manera que antes. Pero tenemos que saber soltar, fluir y confiar en los planes de Dios.
Hay personas que, en lugar de vivir estos momentos con actitud, se reprimen y esconden sus sentimientos, lo viven en silencio y no piden ayuda… es por esto que los sentimientos empiezan a crear enfermedades en las personas, se vuelven personas difíciles, insoportables, enojonas, poco tolerantes, soberbias, egocéntricas… y podría seguir con una lista interminable… Esto habla únicamente de personas heridas que no han trabajado en ellas mismas.
Una persona enojada o amargada es una persona resentida, poco conectada con ella misma, que no ha sabido surfear la vida y que sola se ha victimizado.
¡¡No olvides que tú eres la única creadora de tu futuro, crea el futuro de tus sueños!! ¡¡¡Y cuando estés ahí… no aflojes!!! Mantenlo para toda la vida…
Con Amor,
Pamela.
Por el contrario, también seguro se han topado con personas amargadas y les voy a contar mi opinión sobre cómo es que pudieron hacerse amargadas…. Dios, la vida, nos va poniendo diferentes obstáculos, unos más fuertes que otros… Hay personas que los aprenden a surfear y salen de ellos… otras que en lugar de hacer eso se victimizan y hacen que el momento los carcoma hundiéndose en sus lamentos, pensando ¿Porque a mí? ¿Por qué? La respuesta es por qué lo necesitas para crecer y para hacerte más fuerte y valiente, porque son pruebas para que el día de mañana si algo más fuerte se nos presenta podamos salir adelante y tengamos la frente en alto. No nos preguntemos el ¿Por qué? cuando nos llega alguna situación difícil, si no el ¿Para qué? y con el tiempo les aseguro que lo van descubriendo y el tiempo cura y acomoda todo de mejor manera que antes. Pero tenemos que saber soltar, fluir y confiar en los planes de Dios.
Hay personas que, en lugar de vivir estos momentos con actitud, se reprimen y esconden sus sentimientos, lo viven en silencio y no piden ayuda… es por esto que los sentimientos empiezan a crear enfermedades en las personas, se vuelven personas difíciles, insoportables, enojonas, poco tolerantes, soberbias, egocéntricas… y podría seguir con una lista interminable… Esto habla únicamente de personas heridas que no han trabajado en ellas mismas.
Una persona enojada o amargada es una persona resentida, poco conectada con ella misma, que no ha sabido surfear la vida y que sola se ha victimizado.
¡¡No olvides que tú eres la única creadora de tu futuro, crea el futuro de tus sueños!! ¡¡¡Y cuando estés ahí… no aflojes!!! Mantenlo para toda la vida…
Con Amor,
Pamela.
